
La tragedia de
Cromañon es una herida muy grande en el pueblo argentino. Una herida que jamás cicatrizara. Pero una herida que quizá pueda dejar de doler, cuando se encierre a los culpables. El martes pasado comenzó el juicio oral contra los imputados. Varias personas desfilaran por el banquillo de los acusados tratando de explicar lo que sucedió esa noche. Mejor dicho, tratando de despegarse de las 194 muertes. Lenta y perezosa, la justicia argentina,
recién ahora,
después de tantos años, comienza el juicio que demorará al menos 7 meses. Lenta y perezosa, sí, justa ¿También?
Esa es la cuestión aquí. ¿Quienes son los responsables de tantas muertes? Evidentemente no es mi deber levantar mi dedo índice para juzgar a los acusados. Hay jueces para eso, que (espero) se encargaran de dictaminar, quienes y en que medida tienen responsabilidad. Pero si les puedo decir algo, Callejeros es inocente. No soy necio y sé que mucha gente no piensa como yo. Que los cree culpables y los quiere ver tras las rejas. Esta claro que este tema es el que más divide las aguas entre los argentinos (más que Roman Riquelme).
Pero ellos fueron contratados para tocar y eso hicieron. Lejos están de encargarse de la seguridad de un lugar, el cual estaba habilitado. No son inspectores, son músicos. Les pagan por tocar.
En ese lugar murieron familiares suyos. No hay dudas que Callejeros es tan víctima como todas las personas que estuvieron en Cromañon esa noche. Además, ellos mismos entraron varias veces al lugar para sacar varias personas. ¿En que cabeza cabe llamarlos asesinos? Tuvieron la desgracia que les pase a ellos, algo que le pudo pasar a cualquier otra banda.
Ojala se haga justicia...
Me quiero despedir con una frase del nuevo disco. "Lo que hay", tema 10 de Disco Escultura. "Me queda el verso de aquel rocanrol, el que trajo el viento casi sin razón. Me queda el sueño de ser lo que soy..."